Publicado en Archivo Situacionista Hispano
Industrias Mikuerpo: ¿Merz-Mail es una persona, un colectivo,
un concepto o un medio de comunicación?
Merz-Mail: Merz-Mail responde a la utilización de dos
palabras que tiene su origen en una de las primeras exposiciones que
organizamos en Barcelona: Hommage to Kurt Schwitters. MERZ es el
nombre que Schwitters dió a casi toda su obra
plástica, sobre todo los collages. Es un pequeño
homenaje a Kurt Schwitters y al Mail Art. Nació como un
alias, aka o pseudónimo pero a lo largo de estos
últimos años ha ido evolucionando como entidad propia,
pasando del yo al nosotros. Como leímos en un Amano
recientemente ha pasado a ser la Factoría Merz Mail, por lo
que cualquiera de las alternativas que propones en la pregunta
sería totalmente válida. El trabajo personal
desapareció a partir de la primera exposición
celebrada en Barcelona en 1993 con nombre propio. Desde entonces
desapareció el individuo y empezaron a aparecer otros nombres
como Anna Blume Fan Club que ha firmado convocatorias, recitales o
exposiciones y recientemente Luther Blissett. Nuestro trabajo en el
Mail Art es relativamente reciente, procedemos de Estudios de
Escultura en Escuelas de Artes y Oficios y Facultad de Bellas Artes.
Las dimensiones y aparatosidad de las obras en escultura y los
planteamientos decimonónicos de la Facultad, aparte nuestra
preocupación por los aspectos más sociológicos
del arte y una admiración por las vanguardias
históricas (Dada y Merz), que consideramos no han sido ni
bien estudiadas ni superadas todavia, nos llevó a
replantearnos nuestro trabajo en el mundo del arte.
Desconocíamos el Mail Art hasta esas fechas y un trabajo de
inves- tigación que iniciamos desde la Facultad de Bellas
Artes como trabajo de curso nos lo fue descubriendo poco a poco,
pero nos topamos con una ausencia total de textos y biblio-
grafía sobre el tema. Conforme nos íbamos
introduciendo en el Mail Art más fascinados estábamos
por su enorme potencial en todos los campos del arte, así que
dejamos la facultad para dedicarnos exclusivamente no solo al
trabajo dentro de la Red sino también a difundirlo.
IM: Para quien tenga una conciencia difusa de ello, o simplemente no
lo conozca, ¿podrías perfilar lo que es el mail-art?
MM: Resumir en pocas palabras qué es este vasto movimiento
mundial en el que participan simultáneamente miles de
personas de todos los continentes desde hace cinco décadas es
una tarea de por sí incompleta. Los orígenes
podríamos situarlos en la Black Mountain de Carolina del
Norte en los 50, los Moticos de Ray Johnson - collages que Ray
enviaba a sus amigos-, la New York Correspondence School, las
reuniones "nothings", nadas, alternativa a los Happenings de la
época... El intercambio de material artístico, el
envío de piezas por correo con la consigna "altéralo y
devuélvelo o pásalo" empezó a circular en un
principio en un grupo reducido de artistas que poco a poco se fue
ampliando y extendiendo universalmente. Encontramos así mismo
precedentes en Dada, Merz y los futuristas, desde las postales de
Duchamp, las de Schwitters con su rostro manipulado, además
de la utilización de Schwitters de los sellos de goma en
algunas piezas, o los envios de Marinetti que dejaba al azar del
empleado de correos la manipulación final de la pieza.
Posteriormente a la New York Correspondence School aparecieron
algunos trabajos de Fluxus en este sentido, sellos de artista y
demás como el sello azul de Ives Klein. Tenemos pues la
manipulación que produce el envío postal, la
utilización de la parafernalia postal, sellos de goma, sellos
de artista, sobres manipulados, postales, que marcan sobre todo un
aspecto puramente formal de la obra. Pero el arte postal va mucho
más allá, pues ha incorporado todas aquellas
manifestaciones que están interveniendo en el arte de los
últimos años. El arte postal ha representado y
aún representa un modelo envidiable de "red alternativa" de
contacto que opera a escala mundial con libertad total,
además sin fines lucrativos.
El arte por correspondencia expresa en general un rechazo claro de
las opiniones de la crítica y las reglas del mercado del
arte, propone una participación democrática y una
confrontación cultural descentralizada. No existe
selección, competición, premio o censura en los
proyectos colectivos de mail art; cualquiera puede participar, todo
el material recibido es expuesto. Todos los participantes reciben
documentación gratuita. Pero aún más
estimulante, además de la exposición y el
carácter divulgativo, es el contacto íntimo y
personal, la posibilidad para cada uno de los networkers de tejer
una red de contacto a su medida para desarrollar concretamente sus
intereses y proyectos personales, para encaminar un diálogo
sobre una base igualitaria con otros artistas lejanos que viven en
diferentes realidades.Y funciona bajo los supuestos de: no hay
jurado, ni selección de las obras, no se rechaza nada, no se
devuelve nada, y todos los participantes recibirán
información sobre la exposición...
IM: ¿Podrías desarrollar los caracteres que exhibe
como tal "modelo envidiable de red alternativa"?
MM: En el origen, los años cincuenta, la estructura de la red
era pequeña, centrada en un grupo de artistas de EE.UU que
intercambiaban sus trabajos artísticos, pero cada uno de
ellos, o al menos varios de ellos, fueron extendiendo el circuito a
nuevos componentes y estos mismos a otros tantos. En pocos
años se extendió como una mancha de aceite a nivel
universal, el virus fué creciendo y engendró un cuerpo
que tenía vida por sí solo, no tenía ninguna
cabeza, ni forma organizativa alguna, no existia ningún tipo
de coordinación entre sus miembros, entrar o salir del
Eternal Network ha sido siempre un acto voluntario. La red
está ahí omnipresente a pesar de todos. Pero no existe
tampoco "la red", cada uno de sus miembros es un nodo de la misma, y
tiene su propia red, que se entrecruza con las de otros. Nadie
puede, aunque lo intente, acaparar, centralizar, coordinar, etc. la
estructura de la misma en un ámbito geográfico. Las
convocatorias abiertas, en las que no se rechaza nada, se exponen
todas las obras recibidas, no hay censura, no hay premios, no hay
jurado, son un elemento participativo absolutamente
democrático, que además origina una información
a la que más tarde tienen acceso todos los participantes, las
listas con direcciones de los mismos. Estas listas son en ese
momento una nueva red, que unida a otra y otras van configurando la
red de redes, abiertas a cualquier persona que quiera participar,
intercambiar, contactar etc. Creemos que no existe nada parecido a
nivel universal, pues el correo, salvando las distancias de las
situaciones límites como la censura política o las
regiones más pobres del planeta, es una forma accesible a
todo el mundo. El "estado garantiza" su funcionamiento. La
utilización de otros medios como el teléfono, el
telegrama, el fax o internet acelera en el tiempo esta
comunicación e intercambio, pero tiene también otros
inconvenientes. Existe otra forma de intercambio que cada vez se
está usando más, que es el turismo del mail art;
publicamos unas frases de Ruggero Maggi en un P.O.BOX hace algunos
números que venían a decir lo siguiente:
Después del correo, el teléfono, el fax e internet, el
futuro es el contacto personal.
IM: La estructura del intercambio ¿ha provocado alguna vez
conciencia de "movimiento"? ¿Ha unificado los criterios?
MM: Aunque solemos utilizar la expresión el mail art es el
mayor movimiento artístico de todos los tiempos, no estamos
seguros que sus practicantes consideren que forman parte de un
movimiento, al menos un movimiento organizado. Quizás
habría que definir mejor esta expresión , y acercarnos
más a un movimiento difuso en el que no hay unidad de
criterios, pero sí acuerdos no escritos que se
definirían como el espíritu del mail art, un
movimiento difuso en el que da la sensación que se forma
parte de algo, no una asociación, ni un club, pero sí
algo con capacidad de respuesta ante muchos acontecimientos de la
vida civil. Observando el tipo de convocatorias, planteamientos
estéticos de las obras, los motivos, y el talante de los
participantes, podríamos afirmar que la tolerancia, la
hermandad, la amistad, el desinterés, la generosidad, la
igualdad, y todos aquellos valores positivos que aún quedan
en los hombres y mujeres forman parte de lo que llamanos el
espíritu del mail-art por encima de creencias religiosas o de
ortodoxia política.
En los congresos descentralizados que se han realizado hasta la
fecha (consistentes en reuniones de mail artistas de la misma
región geográfica, o simplemente dos mailartistas
distantes que coinciden en un lugar y tiempo; el intercambio de
información, incluso de ponencias sobre sus propios
criterios, puede quedarse entre los reunidos o extenderlo a la red)
las ponencias, información, o criterios no son vinculantes,
pero ayudan a unificar más que a separar planteamientos y
sirven para vehicular propuestas más cálidas que las
que se producen a nivel postal.
IM: ¿Qué incidencia ha tenido el mail-art en
España?
MM: En el año 1973 se organizó en la Escuela de
Diseño Eina de Barcelona una exposición de Mail Art,
previa convocatoria, suponemos que como experiencia de trabajo para
los alumnos que cursaban sus estudios allí, de la cual nos ha
sido imposible encontrar ningún tipo de información;
unos años más tarde, en 1978, Mata organiza una gran
exposición que se celebra en la Casa del Siglo XV en Segovia
de la que se editó un interesante catálogo (una
carpeta din A5 con fotocopias de las obras en este tamaño);
el tema de la convocatoria era Blanco sobre Negro, una clara
alusión a la fotocopia. Aunque en este catálogo consta
el nombre y país de los participantes, que fueron muchos,
carece de direcciones de los mismos. Mata sí trabajaba como
Networker en esa época. Posteriormente, en 1980, Rafael Tous,
más que networker, coleccionista de arte contemporáneo
y dinamizador de todas las nuevas tendencias del arte,
organizó una gran exposición en su propia
galería, Metronom, de la que se editó un estupendo
catálogo y en la que participaron muchos de los que ahora
siguen trabajando en la red. Este catálogo sí
contenía las direcciones de los participantes, dato
importantísimo para extender la propia red. Entre 1981 y 1984
SIEP (Sapigues I Entengis Produccions) de Reus, donde encontramos a
Francesc Vidal, editor de la revista Fenici, realizaron una
campaña de agitación y provocación
artística a partir de envíos postales de todo tipo,
que han continuado en el año 1995 bajo el nombre de Fills
Putatius de Miró, esta vez enviando tarjetas postales con
diversos mensajes. En los 80 hubieron algunas pequeñas
exposiciones, en Figueres y Pamplona (1981), Pontevedra (1983),
Lleida, Olot (Girona), hasta la gran muestra que se organizó
en Terrassa en 1988. La mayoría de los "antiguos"
mailartistas que siguen trabajando en la red empezó en esta
década, aunque de forma individual trabajando en las
convocatorias de fuera, sin olvidar la enorme actividad de las
compilaciones de poesía y mail art. En los 90 encontramos
diversas exposiciones organizadas por networkers que siguen
trabajando en el mail art en la actualidad: Transfiguración
organizada por Pedro Bericat en Zaragoza, Muestra de Mail Art en
Alcorcón a cargo de Ibirico, Mail Art reciclado del Taller
del Sol en Tarragona, donde encontramos a Cesar Reglero, BCN 93
organizada por Pere Sousa en Barcelona, Bosnia-Herzegovina
organizada por el Taller del Sol, El surrealismo y el mar por Julio
Sánchez en Zaragoza, Homage a Kurt Schwitters en Barcelona
organizada por Merz Mail, exposiciones realizadas en Riudebitlles y
Vilafranca (Barcelona) por Denominació d'origen, muestra del
Mail Art organizada por el Colectivo ACAM en Barcelona,
Exposición de Mail Art en Montcada i Reixac (Barcelona), y
así hasta las más recientes, sin olvidar las
compilaciones como Píntalo de Verde de Antonio Gómez
(Mérida), Piedra Lunar de Corpá (Bargas -Toledo), Las
Carpetas "El Paraiso" de José Luis Campal (Pola de Laviana-
Asturias), Palo Velo de Nel Amaro (Turón-Asturias), los
envíos sistemáticos del grupo Koniec de Madrid, La
Compañía de Granada, El colectivo Stidna de Barcelona,
y un largo etc. o las convocatorias de Copy-Art como American Gothic
en Barcelona o Arte por fotocopia de Industrias Mikuerpo. Nos
habremos dejado muchas convocatorias y exposiciones que mencionar,
pero esta relación es una muestra de que desde hace 25
años se vienen celebrando exposiciones en nuestro
país. Pero creemos que la continuidad ha sido más bien
escasa, salvando unas pocas docenas de artistas que continúan
participando en las innumerables convocatorias que surgen cada
día. Respondiendo en concreto a la pregunta, pensamos que la
incidencia del mail art en la cultura artística de este pais
ha sido más bien escasa, la difusión por los media es
casi nula, por lo que la información sobre el fenómeno
está al alcance de los participantes y el público que
asiste a las muestras sólamente. No obstante diversas
actividades que se organizan en los últimos años,
rozan, utilizan y se acercan a la red del Mail Art utilizando los
directorios, el sistema de convocatoria, los contactos, etc.
IM: ¿Existían revistas especializadas en mail-art
antes de P.O.Box?
MM: P.O.BOX surgió bajo la necesidad de encontrar editado
aquel material que nos hubiera gustado leer en su momento. El primer
número se editó en marzo de 1994. No tenemos noticia
que existiera un zine ni otro tipo de publicación de Mail Art
en nuestro pais hasta esa fecha, por lo que nos dispusimos a
editarlo mensualmente con artículos, convocatorias,
reproduccion de piezas, etc., casi como una labor de proselitismo,
para difundir aquellas ideas que consideramos revolucionarias en el
concepto del arte de nuestro tiempo.
IM: ¿P.O.Box asume esa inclinación revolucionaria
además de ser un zine de mail-art o porque es un zine de
mail-art? ¿Puedes señalar algunos contenidos
calificables de ese modo que se hayan originado o circulado en la
red de mail-art?
MM: P.O.BOX asume lo de revolucionario que tiene el mail-art en
sí mismo, como estructura y planteamiento artístico.
El mail-art siempre se ha caracterizado por entender el arte en su
aspecto más sociológico. La respuesta sería
ambigua, las dos opciones son posibles, aunque nos acercamos
más a la primera. P.O.BOX es un zine de mail art, pero
además de tratar cada uno de los métodos de trabajo
dentro de la red en su aspecto más formal, la propia historia
del movimiento, trabajos de investigación,
bibliografía, poesía experimental, etc., tratan
también los aspectos ideológicos del mismo, y todo
aquello que tenga que ver con la ideología del arte en
general. El mail-art ha asimilado desde sus orígenes los
aspectos más tangenciales, lo que otros llaman más
marginales del arte, desde la fotocopia, los sellos, los sellos de
goma, la performance, la experimentación sonora, el fax, el
arte en la red electrónica, etc. Los creadores que trabajan
estos medios suelen utilizarlos llevándolos a sus extremos,
medio/mensaje, significante/significado, a terrenos de connotaciones
rupturistas con las ideologías dominantes, cultural, social,
políticamente... El soporte barato, de fácil acceso y
reproducción, facilita la difusión de ideas,
apropiándose de medios inimaginables hace unos años,
como la fotocopia, el sello o internet. Recoger y difundir estas
experiencias ha sido el trabajo de diversas publicaciones entre las
que nos encontramos, que han funcionado como vehículo de
difusión, discusión y punto de encuentro. Hemos
acogido en nuestras páginas en los últimos
números diversos artículos relacionados con la
convocatoria de Huelga de Arte para los años 2000 y 2001 en
Barcelona y Madrid por Luther Blisset, Karen Eliot y Monty Catsin,
pero al mismo tiempo otras opiniones divergentes. Creemos que la
discusión es la única forma de enriquecer esta
propuesta para que deje de ser sólamente una consigna.
Por otro lado, y continuando con la pregunta en sí misma,
respecto a situaciones concretas, no sabemos si lo
llamaríamos revolucionario, pero sí que diversos
grupos, colectivos o individuos preocupados por una sociedad al
menos por ahora más igualitaria, han hecho circular desde los
orígenes del mail art convocatorias y envíos
relacionados con la lucha por los derechos humanos, contra la pena
de muerte, contra la discriminación por comportamientos
sociales, contra la desigualdad marcada por el sexo, etnia, color,
sensibilización ante el tema del Sida, las guerras, el
hambre, etc. Son conocidas y demasiadas las convocatorias con estos
temas para enumerarlas todas, solo hay que echar un vistazo al
Global Mail en el que se publican más de 400 convocatorias
cada cuatro meses. Y no olvidemos la lucha por la libertad en las
dictaduras recientes, tanto en America Latina como el este de
Europa.
IM: En el capítulo anterior se pronunciaban a
propósito de la huelga algunos componentes del Grupo
Surrealista (a título personal y no de grupo, como muestran
sus diferentes estimaciones). En números sucesivos de P.O.Box
hemos visto también artículos en pro y en contra de la
huelga de arte, lo que, pienso, confirma que vuestro objetivo es la
comunicación y no el simple panfletismo. No obstante,
¿cual es vuestra posición con respecto a la misma?
MM: Algunos de nosotros trabajamos por cuenta ajena, y conocemos muy
bien el significado de la palabra "huelga" aplicada a las relaciones
sociales, laborales y políticas. El camino hacia la huelga
nunca es fácil, supone normalmente largas sesiones de
discusiones, amargas en muchos casos en las que las posiciones
antagónicas suelen ser irreconciliables por lo que se pierden
algunos amigos en el camino. Durante la huelga los trabajadores
pierden su salario e incluso el trabajo, además hay que tener
en cuenta que la mayoría de las huelgas se pierden, por lo
que la huelga aplicada a cualquier fenómeno, y en este caso
al arte, no es precisamente un camino de rosas y dista mucho de ser
una alternativa cómoda y fácil, lejos del
triunfalismo, el éxito y no hablemos del narcisismo que
envuelve al mundo del arte. Generalmente la poca solidaridad que
manifiestan la mayoría de artistas la podríamos
comparar con los maratones televisivos de caridad, mucho
espectáculo, quedar bien, estar ahí y sobre todo
autopromoción personal. P.O.BOX está apoyando desde el
principio esta convocatoria, hemos publicado sus manifiestos y
también hemos creado una tribuna abierta para la
discusión sobre el tema. Creemos que algunas respuestas
contrarias a la huelga son acertadí- simas. Aunque parte de
nuestro objetivo sea la comunicación, nuestra posición
está muy clara desde el principio. Ya en el número 8
(marzo del 95) de P.O.BOX, había en la portada un llamamiento
a la huelga de arte. Nuestra posición como activistas del
arte será la de cesar totalmente durante la huelga, tanto en
el aspecto creativo como editorial. Estamos pensando mantener las
páginas que tenemos en internet
(http://www.abaforum.es/merzmail) y cederlas a Luther Blisset, Karen
Eliot y Monty Catsin para que hagan una continuidad de la Huelga,
así como cederemos también nuestro espacio en las
ondas (el programa semanal P.O.BOX en Radio P.I.C.A), a los
convocantes, ya buscarán ellos un nombre para estos dos
años, por si creen conveniente utilizar este medio de
difusión en Barcelona. Y no sólamente esperamos que
los creadores se sumen a la Huelga, sino también el
público, que esperamos deje de asistir a cualquier actividad
artística en las galerías, locales alternativos,
museos, etc, que se dedicarían a otra cosa, así como
comprar las revistas, fanzines y demás publicaciones que no
publicarían nada referente al arte. Creemos que las
circunstancias culturales son las idóneas para esta
convocatoria: se han digerido mal algunas vanguardias
históricas y nos encontramos con un panorama desolador.
Además las fechas tienen una carga simbólica
importante.
IM: Entre los argumentos en contra creo que destacan a) los que
denuncian la falacia de considerar al artista un trabajador
especializado como los demás (de lo contrario, no
tendría derecho a la huelga); b) los que insisten en ubicar
la 'fuerza simbólica' de las fechas y en general, el retorno
de conceptos como el de 'huelga' o 'vanguardia' en el marco de un
retorno de viejos mitos. Y c) Los que temen que, si se calla el
cantor, calle la vida. ¿Cómo racionalizáis
estas tres posturas?
MM: Estas preguntas deberían responderlas los convocates de
la huelga: Luther Blisset, Karen Eliot y Monty Cantsin: nuestro
papel como editores de P.O.BOX, por ahora, es publicar tanto los
manifiestos o textos de los convocates como de los detractores de la
misma, a pesar que hemos dejado suficientemente claro nuestro total
apoyo a la Huelga de Arte para el 2000 y 2001. Tambien nos
gustaría aclarar que la Huelga de Arte sólo, e
insistimos en este sólo, está convocada para Barcelona
y Madrid, y es curioso que las críticas a la misma hayan
venido desde Andalucía, Uruguay, Argentina, y como se
verá en el proximo número de P.O.BOX, desde Alemania.
No podemos imaginar al artista como un trabajador asalariado que
depende de un patrón. Lo más parecido sería un
artesano que vende sus piezas al mejor comprador, pero en este
mercado hay un valor añadido que lo distancia del artesano.
No es el virtuosismo, ni el trabajo bien hecho el que da valor a la
pieza, sino unas leyes de mercado en las que influyen muchos
fenómenos, basados la mayoría de ellos en una gran
mentira que es universal. Pero tampoco es éste el caso de la
mayoría de los llamados artistas, pues éstos no viven
exclusivamente de la venta de su obra. La huelga no pretende llevar
a los trabajadores del arte al parón total, sino involucrar a
todas aquellas personas relacionadas con el arte, tanto creadores
como intermediarios y consumidores. Las fechas es lo de menos, pero
una convocatoria de estas características requiere tiempo
suficiente para su discusión y preparación. El cambio
de siglo y milenio está en la mente de todos desde hace
tiempo, se habla continuamente en los medios de esta fecha, desde
los problemas de los ordenadores con los números "00", hasta
propuestas como la de WAM, parece que todo el mundo tiene
intención de cambiar cosas esos años, creemos que ha
sido acertada la elección de esta fecha. Los números
2000 y 2001 ya han calado en el público, sólo falta
que cale la Huelga de Arte. No se pretende con la elección de
estas fechas retornar a los viejos mitos, pues siempre han estado
aquí, la lucha entre la luz y la oscuridad viene de muy
atrás y nunca es una lucha acabada. Respecto a la
última propuesta pensamos que el artista en un individuo
más en la sociedad, y como tal, en cada una de las
manifestaciones de su vida se interrelaciona con el mundo, por lo
que dispone como elemento social de muchos otros canales. Pretender
que con el trabajo artístico está destruyendo la
sociedad capitalista es tan iluso como pensar que con la huelga de
arte se pretende lo mismo.
IM: ¿Os consideráis un retorno de las vanguardias,
pensáis que las vanguardias nunca se fueron o creéis
que nunca han existido y hay que reinventarlas? En definitiva, sois
nostálgicos, reformistas o revolucionarios en el contexto
cultural de la modernidad?
MM: Nunca hemos pretendido ser nada de todo esto, de hecho nunca
hemos pretendido ser nada en concreto. Nuestra forma de trabajo en
el mundo del arte se está reinventando cada día. Por
supuesto que cuando se analiza y se le quiere encontrar
vínculos con parte de la historia del arte, lo primero que
encontramos son las primeras manifestaciones de mail art en los 60,
y si miramos para atrás nos pararíamos en Dada y Merz.
Sería absurdo volver a las vanguardias, tuvieron su
época en el mundo que les tocó vivir, pero podemos
aprender algunas cosas de ellas como aprendemos de los errores y los
aciertos de los que nos preceden. No creemos que haya que inventar o
reinventar ninguna vanguardia, pues siempre se suele caer en el
sectarismo y maximalismo y si algo caracteriza este difuso
movimiento llamado arte postal es precisamente su estructura difusa
y la tolerancia.